Pero este Gimnasia,que se parece en algo al del torneo pasado, no es para nada ,aquel Lobo que forma parte de lindos recuerdos.
Este Gimnasia tiene estiletazos de toques de primera efectivísimos y que dejan tecleando a los defensores rivales, con el agregado de que son en momentos del partido, en que se encarga de definirlos, con la única desventaja ,de que en algunos encuentros no tienen la continuidad necesaria para ser un equipo temible.
Pero este Gimnasia además , se sostiene con tesón y decisión en los momentos difíciles, y más allá de alguna cuota de suerte, cuenta con un alto nivel de los dos arqueros y un convencimiento absoluto de que los demás no van a poder con él ,y que si lo hacen, va a reaccionar de inmediato.
Y entonces aún ante semejante campaña, aparecen los que dudan de su andamiaje como equipo, quienes se tendrán que acostumbrar, por un lado, a no verlo brillar como quizás ellos sueñan y por otro lado a la grata alegría de festejar muchos triunfos, algunos empates y esperemos ninguna derrota. Pero lo extraño es que pueden tener tanta razón, como aquellos que que confían en el rendimiento actual y ven en la efectividad de la tabla, el fiel reflejo de su gran optimismo.
Pero lo más importante sabe que es lo que es: que los dos grupos alientan y nunca esperan los del primer grupo, que al equipo le vaya mal para demostrar que estaban en lo cierto , y jamás tampoco , los del segundo grupo , les refriegan su opinión al resto, aún las posiciones en el campeonato lo tienten a hacerlo. Y aunque puede que hayan en ambos grupos excepciones, es bueno que todos puedan decir: "los hermanos lobos sean unidos, porque esa es la ley mensana, tengan unión verdadera, en cualquier tiempo que fuera,porque si entre blanquinergros pelean, nos devorará un equipo de afuera".
Es que esa es la frase que acercamos a un par de días del 10 de noviembre, en donde se festeja el día de la tradición, en un partido que tuvo bastante folklore en las tribunas y duelo de gauchos cruzados y pitucos en la calle Vergara. Por eso es que con todo respeto a los cronistas , le dimos la oportunidad a que nos contara el partido un amigo gaucho que estaba viendo el partido y que con los ojos bien abiertos , el mate en la mano derecha y la guitarra que ya empezaba sonar,nos contó el partido en una payada que entusiasmado empezó a tararear.
“Contarán que en aquel partido hubo necesidad del local, de tener ante su gente, obligación como capataz, de ir a buscar y buscar. Pero en aquella noche, el lobo ni se inmutó , aún bajo riesgo de ver su rancho cascoteado seguido, y con la firme esperanza de salir rápido para buscarlo al trote a Palacios Alvarenga. Y pasó que en un piedrazo que cayó en el toldo de Viola, apareció el Polaco Rodriguez, aprovechando una pifia pituca para soñar quedarse con un invicto, que ya es una obsesión para los baqueanos de la zona.
Y ahí sí, ya amagó el Lobo, a saltar sobre su presa y meter un zarpazo,porque créame que me contarón, que sintió el impacto . Pero solo fueron amagues, que terminaron en un merodear y merodear. La cuestión es que casi al comienzo del capítulo final, el Ruso Vistarop se hizo un nudo como si le hubieran atrapado sus piernas las boleadoras y solo cuatro minutitos más tarde, volvió Palacios Alvarenga a sus troperías y con gambeta al uno incluida, se fue a festejar tras la estocada letal.
Al rato fue el turno del Ezequiel, que cuerpo a cuerpo le ganó el duelo del minuto 26 al delantero maipucino, para después descolgar la pelota de cuero ,cuantas veces se le apareció por su lugar. Y después , se lo juro por mi mama , que el Lobo lo aguantó como un valiente gaucho, esquivando alguna que otra arremetida del equipo del Gringo que estaba como sulfurado.”
AHIJUNA ,que tenía razón el tipo que se fue por la calle Vergar en caballo ,gritando en medio de la noche: ¡ VAMOS GIMNASIA,VIEJO Y PELUDO NOMÁS!.
Por el Lobo Pituco