A partir de allí se defendió muy bien delante de Viola, el cual no tuvo casi ninguna oportunidad de salvar al mensana, sin desmerecer los centros que capturó con alta eficacia.
Es cierto que no fue una máquina de crear jugadas de peligro, pero volvió a convertir una de ellas con ayuda del portero sanjuanino y tuvo las más claras, ante un experimentado y mañoso albiverde, quien fue ayudado por el árbitro catamarqueño, el que permitió pegar más de la cuenta y el cual le cobró todas las divididas y las no divididas a favor del víbora.
El 1 a 0 del Lobo (video @oaky1 ) pic.twitter.com/p4gmFOI74D
— PuroLobo.com (@Purolobo33) 25 de noviembre de 2017
Y hablando de golpes ,una paralitica lo dejo afuera a Cucchi, ingresando Santiago Dominguez ,quien en un desborde por la derecha le sirvió el gol a Becerra ( como lo había hecho a Palacios Alvarenga contra Gutierrez),pero el Chucho la tiró por arriba del arco visitante. Antes el paraguayo no le pudo dar de lleno a un centro de Espinoza, y solo por eso el Lobo no se fue con un resultado mayor a favor en el descanso.
Ya en la segunda parte, es de destacar como el Pituco, jugó cuerpo a cuerpo el partido , haciendo sentir físicamente el match , a un equipo con muchos jugadores que pasan la barrera de los treinta años como Bernay,Urueña,Ereros y Raponi , entre otros, los cuales conocen al dedillo como se manejan los tiempos de un encuentro, como hablarle al árbitro, como desacomodar en el salto al rival y de esa forma sumando sus condiciones, tienen la capacidad de complicarte la existencia en cualquier momento.
Pero al equipo de Fuentes no lo complicaron, porque no se tentó de los fuegos artificiales para decorar el resultado de otra manera, sino que se preocupó defendiéndose de una manera muy efectiva, sin dejar espacios para que los sanjuaninos se filtraran en la última línea,donde nuevamente Aguirre con Marin , y el aporte de Cortiso , volvieron a tener una muy buena faena.
Palacios Alvarenga, que recibió gran cesión de Santiago Dominguez, perdió el duelo con Perelman que le tapó el zapatazo esquinado , y Lucas Fernandez, quien ingresó como volante en lugar de Mateo Ramirez, casi rompe el palo derecho del uno de la visita. Y hablamos de estas dos situaciones , porque si las sumamos a las de la primera etapa, demostramos que en el ping pong del enfrentamiento, lejos estuvo Gimnasia sobre Desamparados. Ahora,comienza otra parte del campeonato, que serán cuatro partidos en donde se podrá decidir o no rotar jugadores, los que tendrán el desafio si se les otorga la oportunidad, de mantener el nivel de efectividad en el certamen, aportando cada uno lo suyo y a su manera.
Lo cierto es que Este Lobo ha adquirido una personalidad tremenda, que como dicen los libros de psicología, es la suma del temperamento y del carácter. Un temperamento que si bien uno puede tener desde su nacimiento , lo puede fortalecerse por el hecho de vestir una camiseta exigente como la del mensana y un carácter, que se va construyendo en el transcurrir de los partidos, y que lo puede convertir en un equipo muy difícil de vencer, jugando como pueda creer que debe hacerlo para vencer a los rivales.
Los fuegos artificiales le dieron vida a la noche, desfasados en el tiempo, porque quizás merecieron explotar en la cabriola del Turco Yair al tirarse en el verde césped para festejar su conquista y no durante la segunda mitad de la útlima parte del encuentro. Pero de alguna manera le dieron un colorido sin igual en un escenario enclavado en un club que crece a pasos agigantados.
Pero no fue una noche de felicidad plena, porque la gente se marchó por Lencinas, en una noche de esperanza , como los son las que tenemos desde el 17 de noviembre. Y es que a pesar de que la vida continúa, no podemos estar ajenos a lo que pasa.
Es por ellos que aprovechamos en nombre de todos los simpatizantes de Gimnasia, en recordar a los 44 tripulantes del submarino San Juan ARA, esos mendocinos y no mendocinos, que nadie aún encuentra. A los familiares de los tripulantes y a los 44 valientes submarinistas, les hacemos llegar nuestros deseos; “no se rindan, los milagros existen, sólo hace falta pensar en ellos”.
Por el Lobo Pituco